Vestidos de Cóctel

El vestido de cóctel se puede elegir para bodas, bautizos y comuniones, para comidas importantes y para eventos de cierta envergadura cómo podría ser una comunión. En definitiva, son la prenda perfecta y la requerida para eventos semiformales.

Vestidos de coctel para boda de dia

Para poder explicarte en qué ocasiones hay que lucir un vestido de cóctel y las mejores maneras de llevarlo, primero, queremos hacer un repaso por las características de esta prenda tan bonita. 

A grandes rasgos, el vestido de cóctel es un vestido corto de fiesta. Para que nos entendamos, se encuentra a mitad de camino entre un vestido de corte mini y uno midi. Los vestidos midi llegarían hasta media pierna, mientras el vestido cóctel se encuentra siempre a la altura de la rodilla. El vestido de cóctel es una prenda mágica que nos encanta a las mujeres porque queda bien para cualquier edad o estilo, pues nos viste con mucha elegancia y gusto.

El vestido tipo cóctel es elegante y admite muchas propuestas, siempre corto hasta la rodilla para ir más arreglada de lo habitual. Hay que tener en cuenta que tenemos que huir de una serie de características si queremos llevar un vestido cóctel y conseguir que se vea elegante. Debemos evitar los brillos, las transparencias excesivas, los escotes pronunciados, un vestido demasiado corto, o las lentejuelas.

Vestidos coctel

Dicho esto, llegamos al momento de responder a una pregunta universal… ¿para qué tipo de eventos tenemos que ponernos un vestido de cóctel? ¿Debemos usar manga larga, manga corta…? ¿Qué pasa si el evento es en invierno?

Los vestidos tipo cóctel deben llevarse para eventos que requieran cierta etiqueta y lo bueno es que pueden llevarse tanto de día como de noche. Como ya hemos comentado, algo a tener en cuenta a la hora de elegir el vestido ideal es que tanto el corte del mismo como el tejido tienen que ser de cierta elegancia. Para eventos diurnos, aconsejamos acompañarlo de una pamela mientras que si es de tarde se debe llevar un tocado. Estos complementos no deben quitarse en ningún momento del evento, ni aunque nos encontremos en un interior. Combinado con una sandalia de tacón y un bolso diferente y original con pedrería, no dejarás indiferente a nadie.